Diagnóstico clínico y pronóstico de la AME.

La amplia variabilidad clínica para una enfermedad con una etiología común y que se manifiesta dentro de un continuum o espectro1, hizo que hubiesen diferentes intentos de clasificación de la AME. Pero solo fue en el Consorcio Internacional sobre AME, auspiciado por la Asociación de Distrofia Muscular (MDA) en 19912, que se formalizaron inicialmente en un esquema de clasificación de tres tipos según el nivel más alto de función motora alcanzada y la edad de aparición. Posteriormente fueron añadidos subtipos como se especifica a continuación:

Clasificación de la AME

Clasificación de la AME

Pruebas diagnósticas

En caso en de sospecha de AME, la primera prueba a considerar es la demostración de deleciones y/o mutaciones en homocigosis del gen SMN1, con independencia del número de copias existente en el gen SMN2. El procedimiento diagnóstico general ante un proceso con afectación neuromuscular puede aportar datos sugestivos de AME como11:

Pruebas diagnósticas

Pronóstico

La AME representa el paradigma de las enfermedades en las que el pronóstico cambia radicalmente con la implementación de terapias específicas. De forma global, el pronóstico es variable, pero en los pacientes con AME tipo I, se ha demostrado no solo una disminución de eventos que complican el curso natural y degenerativo de la enfermedad, sino también la posibilidad de consecución de nuevos hitos motrices con respecto a los no tratados. Adicionalmente, existen evidencias sobre mejoras significativas en la supervivencia de pacientes sometidos a ventilación mecánica invasiva a través de traqueostomía o soporte respiratorio no invasivo. En la AME tipo II han pasado de un deterioro lento y progresivo a una estabilidad a largo plazo. Sin embargo, la cautela ha de imperar a la hora de valorar las expectativas pronósticas, pues existe una importante variabilidad en la respuesta terapéutica, oscilando entre nula y espectacular. El único factor identificado como predictivo del éxito del tratamiento es la precocidad en su inicio, como se demuestra por la evolución en casos presintomáticos12,13.

Pronóstico

Referenciación

El diagnóstico del AME recae en las Unidades de Neurología Pediátrica y su tratamiento debería de realizarse de forma preferencial en las que específicamente se consideren de referencia para esta patología. El pediatra de atención primaria es una figura clave en la identificación de signos sugerentes de AME, resulta imprescindible su sensibilización hacia los signos de alarma y el contacto directo con su Unidad de Neuropediatra de referencia para una evaluación precoz. Dada la inespecificidad de las manifestaciones de la AME y su solapamiento con otras entidades, cualquier proceso que incluya hipotonía con características periféricas, en especial de presentación precoz, debe de ser evaluado de forma preferencial.

Referenciación
Referencias:

1. DubowitzV.Infantilemuscularatrophy-abroadspectrum.ClinProcChildHospWA1967;23:223-39.

2. 15.MunsatTL.WorkshopReport:InternationalSMAcollaboration.NeuromusculDisord1991;1.

3. UbowitzV.Veryseverespinalmuscularatrophy(SMAtype0):anexpandingclinicalphenotype.EurJPaediatr Neurol 1999; 3:49-51. PubMed: 10700538.

4. Kolb SJ, kissel JT. Spinal muscular atrophy. Neurol Clin 2015; 33(4): 831-846. doi:10.1016/j.ncl.2015.07.004.

5. Darras BT. Spinal muscular atrophies. Pediatr Clin N Am 2015: 62:743–766 http://dx.doi.org/10.1016/j.pcl.2015.03.010

6. DubowitzV.Infantilemuscularatrophy.Aprospectivestudywithparticularreferencetoaslowlyprogressivevariety. Brain 1964; 87:707-18.

7. RussmanBS.Spinalmuscularatrophy:clinicalclassificationanddiseaseheterogeneity.JChildNeurol2007; 22:946-951. PubMed: 17761648.

8. CorattiGM,LucibelloSP,MontesJ,PasternakA,BovisF,ExpositoEscuderoJetal.ClinicalVariabilityinSpinalMuscular Atrophy Type III. Ann Neurol 2020; 88:1109-1117. doi: 10.1002/ana.25900. Epub 2020 Oct 2. PMID: 32926458.

9. Chung BH, Wong VC, P. Spinal Muscular Atrophy: Survival Pattern and Functional Status. Pediatrics 2004; 114 (5) e548-e553; DOI: https://doi.org/10.1542/peds.2004-0668.

10. H.J. Gdynia, A.D. Sperfeld, L. Flaith, et al. Classification of Phenotype Characteristics in Adult-Onset Spinal Mus- cular Atrophy Eur Neurol 2007; 58: 170-176.

11. Markowitz JA, Singh P, Darras BT. Spinal muscular atrophy: a clinical and research update. Pediatr Neurol. 2012 Jan;46(1):1-12. doi: 10.1016/j.pediatrneurol.2011.09.001. PMID: 22196485.

12. De Vivo DC, Bertini E, Swoboda KJ, Hwu WL, Crawford TO, Finkel RS et al. Nusinersen initiated in infants during the presymptomatic stage of spinal muscular atrophy: Interim efficacy and safety results from the Phase 2 NUR- TURE study. Neuromuscul Disord 2019; 29:842-856. doi: 10.1016/j.nmd.2019.09.007. Epub 2019 Sep 12. PMID: 31704158; PMCID: PMC7127286.

13. Dangouloff T, Servais L. Clinical Evidence Supporting Early Treatment Of Patients With Spinal Muscular Atrophy: Current Perspectives. Ther Clin Risk Manag 2019;15:1153-1161. doi: 10.2147/TCRM.S172291. PMID: 31632042; PMCID: PMC6778729.

×

Medical Information Request

×

Ask Speakers